Los Disturbios de Rodney King




El hecho de que se produzcan conflictos interraciales en EE.UU. no es sólo cosa del pasado mas reciente en dicho país, ya desde la época de la esclavitud se dieron rebeliones por parte de los afroamericanos con resultados violentos, la mas sangrienta quizás encabezada por el esclavo rebelde Nat Turner, a principios de siglo XX se dieron otras como los hechos acontecidos en Florida, la que es conocida como la Masacre de Rosewood. Ya en los años 60 en plena lucha por los derechos civiles y con líderes como Malcom X o Martin Luther King a la cabeza se dieron los casos mas extremos como en los disturbios de Watts, en Los Ángeles, en 1965 por la detención de un automovilista negro en supuesto caso de embriaguez y que se saldó con 34 muertos y miles de arrestados. En 1968 el suceso se reproducía a escala nacional en mas de 100 ciudades estadounidenses tras el asesinato de Martin Luther King.


El 3 de Marzo de 1991 se producía uno de los hechos mas infames en la historia reciente del país de las libertades y la igualdad, hechos que llevarían a que la historia se repitiera nuevamente en Los Ángeles y es circunstancias muy parecidas a lo acontecido en 1965. En la autopista Foothill se produce una persecución a un joven motorista negro que iba a 200 Km. por hora, finalmente  tras una persecución durante 6 Km. se detiene en un cruce y la policía logra detener al conductor que parece ser estaba bajo los efectos del PCP, una droga de diseño. Un hombre que estaba en su casa y al que habían despertado las sirenas coge su cámara y graba la espeluznante escena que acontecía, en el lugar habían 27 agentes de policía de los cuales dos no paraban de golpearlo sin piedad sucesivamente con el pretexto de que detectaron indicios de que el motorista iba a sacar un arma, la cámara en total recogió nada menos que 56 golpes antes de ponerle las esposas, el arrestado, un joven de 25 años llamado Rodney King, negro, joven y sin trabajo lo convertía en una víctima común del sistema y por lo tanto en objetivo de la policía. Al día siguiente el videoaficionado vendió la copia casera a una cadena local, la KTLA, la cual retransmitiría por la noche en horario de máxima audiencia la escalofriantes imágenes. Pronto se difundirían las imágenes de costa a costa provocando la indignación de una gran parte de la población y en especial de la comunidad afroamericana, y para ser mas concretos la de la comunidad residente en Los Ángeles ya que tras un primer juicio los policías fueron absueltos de toda culpa en un juicio formado por un tribunal blanco. Este pequeño hecho a priori común desató la ira contenida de la comunidad negra a lo largo de tantos años, desembocando en el que probablemente sea el mas catastrófico disturbio de carácter racial que se recuerda en EE.UU. hubieron 58 muertos, mas de 2300 heridos, 12.000 detenidos, 2000 coches incendiados, cientos de edificios en llamas y algunos barrios como Koreatown fueron prácticamente destruidos en su totalidad, lo cual supuso unos daños de 500 millones de dólares superando todas las cifras registradas en anteriores disturbios. Pero ¿cuáles fueron las causas exactas?

                      
                                 VÍDEO DE LA PALIZA A RODNEY KING.



Estado en el que quedó Rodney King tras la paliza.



Causas y contexto social


En aquella época California sufrió un aumento considerable de prisiones federales siendo las primeras víctimas las minorías latina y afroamericana, sobre todo ésta última, no en vano la proporción por  aquel entonces era de 215 blancos encarcelados por 100.000 habitantes frente a los 1951 por 100.000 de afroamericanos, la tasa de paro afectaba a 14,2% frente al 6,9% de blancos y en los jóvenes la cifra se disparaba al 38% frente al 15 %. La brutalidad policial estaba a la orden del día, de hecho sólo en 1991 la ciudad de Los Ángeles tuvo que indemnizar con mas de 13 millones de dólares a víctimas que sufrieron  abuso policial. Y no todo acaba aquí, puesto que lo que conlleva directamente el paro y la exclusión social es que la juventud ante los impedimentos del sistema, se hunda en el oscuro mundo de las drogas, bandas y crímen. No en vano por aquel entonces ya existían dos grandes bandas formadas por afroamericanos que residían en el gueto y que controlaban el crimen en la zona de South Central con Watts, zona donde principalmente sucederían la mayor parte de los disturbios. estas bandas son conocidas como los Crips y los Bloods, las cuales jugaron un papel fundamental durante los disturbios que comentaré mas adelante. Al no tener poder adquisitivo y al ser zonas urbanas donde se ha depreciado el valor del inmueble por razones de inseguridad, los comerciantes coreanos establecen sus negocios de ultramarinos y licorerías en barrios tradicionalmente negros, desplazando así a los propietarios de siempre y convirtiéndose en la pequeña aristocracia del gueto afroamericano, lo que causa el odio hacia la comunidad coreana, que a ojos de los residentes negros acaban de llegar y sin ni siquiera hablar el idioma del país ya tienen un negocio propio. Una de las chispas que encendió la llama definitiva del odio entre estas dos culturas fue la muerte de una adolescente negra llamada Latasha Harlins a manos de una propietaria coreana de un establecimiento llamada Soon Ja Du por una discusión acerca de una botella de zumo. Este hecho sólo ocurría 13 días después del incidente de Rodney King y en un juicio se le condenó por homicidio y al poco se le concedió la libertad condicional. Ya era mas de lo que la comunidad afroamericana estaba dispuesta a aguantar. Por otra parte la población latina se había incrementado en un 119% en la década anterior y desplazaron en algunos sectores laborales a la población negra al cobrar la mitad de salario y al no estar sindicalizados. Todas estas razones propiciaron la situación necesaria para que estallara la rabia y la ira de una raza durante cientos de años despreciada por el sistema, y equivocados o no en el método de actuación no debemos pasar por alto su situación social.


Comienzan los disturbios

                                                                                
El caos se adueñó de las calles durante las revueltas.
El 29 de Abril de 1992, un año después de que el vídeo viera la luz, los tres agentes de la LAPD inculpados, Lawrence M. Powell, Timothy Wind y Theodore Briseno y el supervisor Stacey C. Koon, de los cuales tres eran blancos y uno hispano, fueron enjuiciados a petición del Jefe de Policia de Los Ángeles entre otras cosas por abuso de la fuerza y uso de arma letal. Finalmente tras siete semanas de deliberación un jurado formado por diez blancos, un latino, un asiático y ningún negro da un veredicto escandalizador en el que absuelve de la mayoría de los cargos a los cuatro agentes. Muy pronto la opinión pública se hace escuchar en una muestra unánime de enfado e indignación, incluso el alcalde de Los Ángeles, Tom Bradley (de raza negra) critica la decisión del jurado por televisión. Sobre las cinco de la tarde South Central se convertía en la zona cero de los disturbios, la policía inconsciente de que se podrían enfrentar a algo mas que a unos actos de vandalismos esporádicos aseguran que estarán preparados para enfrentarse a lo que venga, pero no fue así, ya que ni siquiera tenían un plan en caso de que el veredicto fuera favorable a los enjuiciados y creara la indignación popular, simplemente porque no se preveía que fuera a ocurrir algo de tales proporciones, empiezan a recibir llamadas de automovilistas que son recibidos a piedras entre las avenidas Florence y Normandy, ser blanco y perderse por South Central en los primeros coletazos de los disturbios significaba casi seguro llevarse una cruel paliza. Una situación insostenible de caos y anarquía donde el pillaje y el saqueo fue la principal motivación de muchos ciudadanos se apoderó muy pronto de la zona de South Central con Watts, los alborotadores eran cada vez mas numerosos y se comportaban de manera mas violenta y finalmente la policía se tuvo que retirar sin poder ni siquiera proteger a los bomberos que acudían a apagar alguno de los edificios en llamas o a las ambulancias que iban a recoger heridos. Los helicópteros con cámaras a bordo retransmitían atónitos lo que sucedía tras la retirada de la policía, se sacaban a los conductores blancos de los coches para propinarles brutales palizas, como el conocido caso de Reginald Denny, a quien sacaron del camión que conducía para golpearle repetidas veces e incluso con un ladrillo en la cabeza hasta dejarlo a punto de morir, se saqueó e incendió todo negocio regentado por una persona no afroamericana en la zona, para evitar el saqueo los propietarios negros escribían con spray "Black Owned" (propietario negro) pero incluso en ocasiones se saquearon negocios donde los dueños eran afroamericanos. A las 11:06 el alcalde Tom Bradley declara el estado de emergencia y poco después el gobernador Pete Wilson ordena el despliegue de la Guardia Nacional, cerca de un millar son desplazados a la zona de los disturbios que llegan 24 horas tarde a la zona del conflicto, así que al día siguiente la ciudad amanece en llamas y con los alborotadores aún en pie de guerra, a los que se han sumado ahora, latinos y blancos en actos de pillaje y destrucción. Ahora le tocaría el turno al barrio coreano que ardió entero prácticamente durante los días que duraron los disturbios, los negocios coreanos fueron las principales víctimas de los alborotadores, por causas de diferencia cultural y tensión racial. Ya la Black African Freedom Fighters, una agrupación de jóvenes revolucionarios negros, había advertido que los negocios coreanos arderían si los cuatro acusados eran declarados inocentes, y ahí fue donde dirigió su mirada la indignada comunidad afroamericana. Los coreanos armados defendieron sus negocios a tiros en algunas ocasiones pero eso no impidió que la violencia desatada se cebara con la población de origen asiático que vieron calcinados sus negocios. Los altercados se expanden llegando a Hollywood al norte y a Long Beach al sur pasando por Compton, pero sólo entonces, cuando los altercados llegan a barrios blancos de clase media y alta es cuando parece que se decide actuar con firmeza. El viernes 1 de Mayo Rodney King aparece por televisión declarando "Por favor, tenemos que llevarnos bien", el equipo de baloncesto de los Lakers aplazó el partido del sábado y la vida social se interrumpió por completo, sólo con la llegada de la guardia nacional se empieza a restablecer el orden en las caóticas calles y comienzan las tareas de limpieza, tres días después el presidente George Bush que había declarado a Los Ángeles como "zona de catástrofe nacional" moviliza a un millar de soldados y finalmente el Lunes 4 de Mayo la ciudad es pacificada y se levanta el toque de queda. 



Graffiti callejero que llama a la unión entre bandas.
 Durante las revueltas las bandas callejeras jugaron un papel importante, Crips y Bloods unieron fuerzas en hacer demandas de manera conjunta a políticos y policías de la ciudad, y si bien acordaron un alto el fuego durante los días que duraron los disturbios, algunas facciones aprovecharon la confusión para ajustar cuentas. En las calles se podían distinguir pintadas que llamaban a la unión entre ambas bandas y los mexicanos "Crips, Bloods, Mexicans toguether tonite" (Crips, Bloods y Mexicanos unidos esta noche) pero realmente las bandas chicanas y otras asiáticas como las coreanas, camboyanas, chinas o vietnamitas no se sumaron a la protesta, por lo que el protagonismo estuvo prácticamente en manos de las bandas afroamericanas que estaban formadas por unos 80.000 miembros integrados en unas 450 facciones, la gran mayoría pertenecientes a los Crips.



Un ciudadano muestra como quedó su negocio tras los disturbios.
                                        
                     VÍDEO QUE MUESTRA LA PALIZA A REGINAL DENNY

   



A pesar de los argumentos a favor del uso de la fuerza policial, donde se asegura que Rodney King desobedeció y atacó a los agentes de la ley y, que el vídeo íntegro no fue retransmitido por la KTLA omitiendo la supuesta agresión por parte del detenido, es evidente que el uso de la fuerza bruta fue desmesurado y sumamente desproporcionado, las pruebas médicas y las fotos que se tomaron al agredido tras los hechos lo corroboran; se muestran lesiones, fracturas, cortes y moratones. Que 27 policías no sean capaces de reducir a un hombre y que opten por un método mas violento de inmovilización es síntoma de brutalidad policial y no de otra cosa. Desacuerdos entre el Jefe de Policía y el Alcalde, la retirada de la policía del cruce de Florence con Normandy y que gran parte del equipamiento antidisturbios estuvieran a 500 Km. al norte de Los Ángeles fueron detonantes para que el caos y el desorden se adueñara de las calles, pero la gran razón para que todo esta catástrofe ocurriera no son otras que la exclusión social y la falta de oportunidades que hace que las minorías étnicas se hacinen en guetos dando lugar al desentendimiento entre culturas y el recelo interracial en una ciudad donde conviven ciudadanos de 146 nacionalidades y donde se hablan casi 100 idiomas. La sociedad del Los Ángeles quedó muy tocada a raíz de los disturbios y mostró el frágil equilibrio que existe no sólo entre razas sino entre clases sociales, la cultura popular se basó en los hechos ocurridos para hacer cine, televisión y música donde varios grupos musicales de rap, punk o metal mostrarían su indignación ante los hechos. El caso fue revisado en 1993 y dos de los cuatro agentes fueron condenados a 30 meses de prisión y en 1994 Rodney King fue indemnizado con 3, 5 millones de dólares por la municipalidad de Los Ángeles, pero ninguna de estas medidas tardías resultó ser un parche para cubrir las profundas heridas que sufren las clases bajas. Sin duda alguna hay una necesidad de mayor entendimiento entre culturas pero sobre todo se necesitan mejores programas sociales que ayuden a la integración en todos los ámbitos y una erradicación urgente de la pobreza en la que es considerada la capital del hambre en EE.UU.

                          
                        
       ESTADO EN EL QUE QUEDARON LAS CALLES TRAS LAS REVUELTAS.




Bibliografía.

-Documental Canal Historia,Los Disturbios de Rodney King.
-En el gueto; texto de Jaume Vidal.
-Wikipedia.

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